Momentos de tensión y pánico vivieron en la tarde de ayer los comerciantes, empleados y transeúntes del ‘corazón comercial’ de Santa Marta, el Centro Histórico, tras la respuesta a bala del dueño de una joyería a dos delincuentes que intentaron robar prendas de valor que allí se comercializan..
Los hechos ocurrieron sobre la Avenida Campo Serrano (carrera 5) entre calles 11 y 12, momentos en que en esa zona se adelantaban los trabajos de remodelación. El delincuente dado de baja fue identificado por la Policía Metropolitana como Edinson José Patiño Ortiz, oriundo de Venezuela y conocido como alias ‘El Ruso’.
De acuerdo con la información que recopiló la institución policial, alias ‘El Ruso’ llegó en compañía de otro individuo a la joyería con la intención de reparar un reloj, pero cuando era atendido por el propietario del establecimiento desenfundó un arma y le apuntó.
Al parecer, Patiño Ortiz le pidió todos los artículos de valor que tenía en las vitrinas. Sin embargo, cuando el dueño se disponía a entregarlos, fue más ágil y sacó un arma de fuego que portaba en la pretina de su pantalón, con la que le disparó en cuatro oportunidades.
Pese a que alias ‘El Ruso’ intentó correr para poner su vida a salvo, no lo logró, pues en la huida se desplomó y perdió la vida, su cuerpo quedó en la mitad de un andén, boca abajo y con la parte superior sumergida en un charco de sangre, producto de los balazos que recibió. Su ‘compinche’, una vez escuchó las detonaciones del arma del propietario de la joyería, corrió y escapó en una moto que lo esperaba sobre la Avenida del Ferrocarril, en la que se dio a la huida con rumbo desconocido.
La coronel Adriana Gisela Paz Fernández, comandante de la Policía Metropolitana, indicó que el propietario de la joyería actuó en legítima defensa, sin embargo quedó a disposición del Fiscal en turno en la Unidad de Reacción Inmediata de la Fiscalía General de la Nación.
Hasta el lugar de los hechos llegaron uniformados de la unidad de vigilancia por cuadrantes de la institución policial y adelantaron las labores correspondientes, que consistió en el acordonamiento del lugar y la recopilación de información. Finalmente, funcionarios de la unidad móvil de criminalística del CTI de la Fiscalía llevaron a cabo la inspección técnica del cadáver y una vez culminaron los actos urgentes llevaron el mismo hasta la morgue del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses