Un monumento a la burra, instalado en el sector del pozo de majagual en Sincelejo ha generado todo tipo de polémica, versiones a favor y contra se escuchan por una obra elaborada con pedazos de porcelana de múltiples colores que la convierten en todo un atractivo, la escultura se llama mi primer amor y lo que más controversia ha generado es el mensaje de la placa que dice textualmente "obra que rinde homenaje al hombre sabanero mamaburra del Sincelejo de antaño". Lo que para muchos hace clara referencia a la zoofilia, las duras críticas desataron el malestar de los creadores.
“Y créanme que ha sido una total polémica, estábamos preparados para lo que se venía estábamos éramos conscientes de que íbamos a enfrentarnos al doble moralismo o la doble moral del de la gente de aquí del pueblo, que no valora nada, que no le da valor a nada de lo que hacemos como sincelejanos, que todo lo critica, que todo lo destruye, que siempre están buscándole la mala todo para poner por debajo nuestro pueblo”. Luis Armando Jaraba, propietario de la escultura.
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La alcaldía de Sincelejo dio 24 horas para que el monumento a la burra fuera desmontado porque además no tenía permiso por parte de la Secretaria de planeación para su instalación.
" Queremos informarle que nuestra administración rechaza rotundamente la intervención sin permisos en espacio público por lo tanto ya se dio la orden para el desmonte inmediato de esta escultura que allí se colocó, por otro lado estamos conscientes de que el artista quiso demostrar en la ciudad una tradición que es el elemento de trabajo de antaño que teníamos en la ciudad como es el burro, el caballo, que en su momento eran las herramientas con las cuales se transportaba el agua en las ciudades Sincelejo. Con respecto al mensaje que está colocando en este monumento no representa ni nuestra cultura”. Dijo alcalde de Sincelejo Andrés Gómez
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Lo cierto es que pese a sus pocas horas de instalación este se ha convertido en un paso obligado por visitantes de la ciudad y por los mismos residentes quienes aprovechan para inmortalizar en una foto la creatividad de un grupo de artistas sucreños.