Más de 200 estudiantes están en riesgo por daños en estructura de aulas flotantes en zona rural de Chimichagua
En evidente estado de abandono se encuentran las aulas flotantes de la Institución Educativa Nuestra Señora del Carmen, en Sempegua, jurisdicción de Chimichagua, donde los salones no cuentan con las instalaciones adecuadas para que los 242 estudiantes puedan recibir clases.
Algunas aulas están con el techo incompleto, las ventanas y puertas deterioradas por lo que representan un inminente riesgo para los niños y jóvenes que allí estudian.
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“Los salones se encuentran en mal estado, las puertas y ventanas no sirven, no contamos con fluido eléctrico, las baterías sanitarias se encuentran dañadas. Solicitamos a la administración municipal que por favor nos ayuden y nos extienda la mano para poder brindarle a la comunidad estudiantil un ambiente sano y agradable donde recibir sus clases”, aseguró el docente Jesús Noble.
Por lo anterior, los alumnos dan clases en aulas con techos de zinc, debajo de árboles o dentro de iglesias.
Cabe señalar que las escuelas flotantes se construyeron en el año 2013 por la Universidad EAFIT en convenio con la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo del Desastre y La Unión Europea, como medida de adaptación al cambio climático, con el objetivo de que los estudiantes pudieran desplazarse en época de invierno, ya que cuando se presentaba el desbordamiento de la ciénaga de Zapatosa, debían buscar refugio en la parte alta para continuar las clases o perderlas, tras la inundación de las aulas.
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La escuela cuenta con un puente de acceso en madera plástica que se desarrolló a partir de un modelo de sistemas flotantes, el cual se conecta a las aulas que están soportadas en una plataforma en concreto ligero.
No obstante, desde que inició la pandemia en el año 2020, algunas personas terminaron de dañar y vandalizar el plantel.