La crisis en el departamento de La Guajira, sobre todo en las comunidades indígenas en temas de alimentación y agua potable continúa siendo una de las causas de las muertes de los infantes wayúu.
En una comunidad indígena ‘Marañamana’, sector de El Cardón en la Alta Guajira, en jurisdicción de Uribia, dos niños que respondían a los nombres de Deiver Ipuana Jusayu de 8 años y Víctor Ipuana Pushaina de 7 años, fallecieron ahogados cuando intentaban conseguir agua de un pozo artesanal.
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La Organización indígena Nación Wayuu y la asociación Shipia Wayuu denunciaron el abandono del Estado colombiano ante el cumplimiento de la Sentencia T-302 donde la alta corte declaró el Estado de Cosas Inconstitucionales frente a la protección especial de los derechos del agua, alimentación y salud para las comunidades indígenas de los municipios de Uribia, Maicao, Riohacha y Manaure.
Resaltando que el pasado fin de semana un joven wayuu identificado como José Augusto Prieto Jalaliyuu en la comunidad ‘Makukulaalu’ ubicada en Nazaret, en la Alta Guajira, murió sepultado por un alud de tierra presentado en un pozo artesanal del que trataba de sacar agua para saciar la sed de su familia.
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“Presidente, como colombianos nos movilizamos por un cambio y en territorio wayuu aún no vemos el horizonte del cambio. Las mentiras de Catalina Velasco sobre las famosas soluciones al suministro de agua, es una fiel muestra que siguen fortaleciendo a los depredadores. La indolencia total de la ministra. Utiliza la sonrisa inocente de los niños wayuu para justificar el engaño al país. La misma Corte Constitucional pudo corroborar la magnitud de la tragedia humanitaria que viven las comunidades en territorio”, indicó Shipia Wayuu.