
Más de 100 familias indígenas desplazadas recibieron asistencia humanitaria en Tierralta (Córdoba)
El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) brindó atención psicosocial en emergencias a muchas familias afectadas por el desplazamiento de las comunidades indígenas Embera Katío de Nejondó y Koredó en jurisdicción del municipio de Tierralta.
Los indígenas Embera Katio, ante el temor de quedar en medio de acciones armadas, se vieron obligados a desplazarse masivamente en el mismo territorio.
Le puede servir: Unidad Nacional de Gestión de Riesgo iniciará intervención en el dique 'Caregato' en Bolívar
Según el ICBF, en Koredó se encuentran 115 familias, 378 personas, de las cuales 202 son niñas, niños y adolescentes, entre los cuales hay 85 de primera infancia, a quienes el Bienestar Familiar les entregó bienestarina líquida.
Mientras tanto, en la comunidad Nejondó se realizó una olla comunitaria (Bienestarina al Fogón) que permitió la entrega de 180 porciones a la comunidad y también se entregaron 230 unidades de bienestarina líquida a los niños, niñas y adolescentes. En esa comunidad se realizó actualización de registro de familias que fueron atendidas en el mes de noviembre.
El Instituto Colombiano Bienestar Familiar, ICBF, informó que acompaña a las comunidades y a los niños, niñas, adolescentes y madres gestantes que se encuentran en el territorio.
Lea aquí: Cartagena tendrá Plan de Ordenamiento Territorial tras 25 años
Cabe recordar que la fundación de derechos humanos Cordoberxia había alertado que desde el 8 de enero de este año 611 personas (179 familias) del pueblo indígena Embera Katío del resguardo del Alto Sinú, se desplazaron desde las zonas dispersas de las comunidades de Nejondó y Koredó hasta sus centros poblados por el temor a quedar en medio de acciones armadas debido a la presencia de actores armados en el territorio.
En esa ocasión alertaron que en el territorio existen escenarios de riesgo por reclutamiento, uso y utilización de niños, niñas y adolescentes, violencias basadas en género y restricciones a la movilidad que afectan los medios de vida y la dignidad de las comunidades indígenas Emberá Katío. La situación se viene presentando sistemáticamente desde el año 2022.