"Los amarraban para que obedecieran": madre de niño víctima de presunto maltrato en colegio de Cartagena
Carolina Martínez, es la madre de un niño de 5 años que al parecer, durante su año escolar durante el 2024 fue víctima de maltrato infantil en el Colegio de La Salle de Cartagena. La mujer relata que habrían sido varias ocasiones y cómo se enteró, luego de haber retirado al menor de la Institución para el 2025 de que su hijo era sometido a algunos métodos "duros" para obedecer a la docente encargada.
Inicialmente a Martínez, le advirtieron que la docente ejercía fuerza sobre los estudiantes, pero, no habían pruebas que sustentaran esta situación, a lo que ella junto a su esposo tomaron la decisión de sacar al niño del colegio y así, evitar cualquier evento que expusiera la seguridad de su hijo.
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Sin embargo, luego de inscrito el menor de edad en otra institución, le llegó una fotografía en donde se puede ver al niño en el Colegio de La Salle, en el que era su salón, amarrado a su pupitre mientras almorzaba.
“Me enviaron una foto en la que mi hijo estaba amarrado a la silla, lo vi con mis propios ojos y no podía creerlo. Fue un shock. Nunca imaginé que algo así pudiera pasar en el lugar donde confiaba para que mi hijo estuviera seguro", dijo Martínez en una entrevista con RCN Radio.
Según la denuncia, los hechos habrían ocurrido en el contexto de una “técnica educativa” utilizada por una de las profesoras del colegio para disciplinar a los niños. Además de la foto de su hijo, otras madres han expresado inquietudes similares, lo que encendió una alarma entre los padres de familia.
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Incluso, en conversación con RCN Radio, Marilyn Narváez, otra madre también relató lo que su hija, luego de preguntarle si también era tratada de forma similar, relató.
"Mi hija es una de las víctimas, nos pusimos en el trabajo de preguntarle a todos los niños luego de conocer lo que estaba pasando. Todos afirmaron ese procedimiento que hacía la profesora, que en su momento dijo que había sido una vez a la mamá que denunció inicialmente y es falso. Lo utilizaba como medio de corrección donde ella manifestaba a los niños que habían unas reglas y de no cumplirse, serían amarrados en sus sillas”, detalló Narváez.
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Carolina Martínez, quien inicialmente interpone la denuncia ante las autoridades competentes y de hecho, el caso es materia de investigación por parte de la Secretaría de Educación, recordó que, al principio, su hijo mostró signos de angustia, incluso en ocasiones cuando lo recogían a las afueras del colegio se escondía en sus hombros y lo hallaban desanimado. Los padres, al parecer, no comprendían el motivo de las actitudes hasta ahora que lograron y de alguna manera, comprobar los métodos disciplinarios empleados en el aula.
“Yo no podía creerlo. Pensaba que era un rumor, pero luego me enteré que mi hijo no era el único. Otros niños también habían sido amarrados o castigados de formas similares. No es posible que esto esté ocurriendo y que no se haya hecho nada”, agregó la madre.
Además, Martínez indicó que el niño es atendido por psicología, porque al parecer, normalizó los actos violentos de la docente y además, sentía cariño hacía la mujer por ser su profesora.
Ante la preocupación generalizada, RCN Radio conoció un comunicado oficial emitido por el Colegio De La Salle a los padres de familia, tras la viralización del caso en redes sociales. En el documento, la institución explicó que no tuvo conocimiento de los hechos hasta el 29 de enero de 2025 y aseguró que se están tomando medidas para esclarecer las circunstancias en las que ocurrieron los hechos.
“Reafirmamos el absoluto compromiso de la institución con la prevención, corrección y sanción de cualquier conducta violenta, denigrante o constitutiva de acoso escolar, rechazando abiertamente cualquier comportamiento que busque infundir miedo, angustia o imponer disciplina a través de la violencia”, indicó el comunicado, firmado por el rector hermano Miguel Ernesto García Arévalo.
El colegio también subrayó que se llevará a cabo una investigación detallada y rigurosa, y que, una vez esclarecida la situación, se adoptarán las medidas necesarias para evitar que sucesos similares se repitan en el futuro.
“Reiteramos nuestro compromiso de velar por la seguridad integral de los menores, ya que la institución educativa es, y debe seguir siendo, un espacio seguro para nuestros niños, niñas y adolescentes, donde se protejan sus derechos y se asegure su desarrollo libre de cualquier conducta que atente contra su bienestar físico o emocional, su seguridad y su integridad personal”, concluyó el comunicado.
La denuncia de Carolina Martínez ha generado una ola de apoyo en redes sociales, donde numerosos usuarios han expresado su preocupación por el bienestar de los niños involucrados. Padres de otros menores han alzado la voz exigiendo respuestas claras de la institución y pidiendo que se garantice que este tipo de prácticas no se repitan. A medida que avanzan las investigaciones, tanto padres como autoridades locales esperan que se tomen medidas firmes para garantizar la protección de los derechos de los estudiantes y asegurar que el colegio siga siendo un lugar seguro para los menores.