Uniformados de la Policía Nacional.
El Colectivo Caribe Afirmativo, aseguró que la mujer trans se encontraba en un sector de la ciudad laborando como trabajadora sexual.
Por medio de un comunicado el Colectivo Caribe afirmativo, corporación que defiende los derechos de la comunidad LGBTIQ+ dio a conocer lo que sería un caso de violencia y sometimiento hacía una mujer trans trabajadora sexual en Cartagena. Indican que los hechos se registraron el pasado 21 de abril en la madrugada, cuando esta persona se encontraba laborando en un sector de la ciudad.
"Kata, una mujer trans ejerciente del trabajo sexual en el sector San Pedro, fue víctima de hostilidad y violencia policial. Los agentes de policía, en un acto de brutalidad, golpearon, patearon y sometieron a vejámenes a Kata, motivados por los prejuicios en contra de su identidad de género. Las agresiones alcanzaron niveles inhumanos, forzando a Kata a huir en busca de refugio", señalaron.
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Y agregaron, "desesperada, se arrojó a un caño para ocultarse entre aguas residuales, tratando de escapar de la persecución policial. Sin embargo, los uniformados la arrastraron fuera del agua, la desnudaron y la sometieron a un cruel proceso de contención, utilizando pistolas taser. Continuó siendo víctima de la brutalidad policial, mientras la mirada indiferente de los habitantes y comerciantes de la zona".
Para este colectivo, "este episodio no solo deja en evidencia la vulnerabilidad de las personas trans en Cartagena, sino también la complicidad y la indiferencia de la sociedad ante tales atrocidades".
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A propósito de este tema Wilson Castañeda, director de Caribe Afirmativo condenó este hecho.
"Rechazamos rotundamente todo acto de violencia ejercido contra la disidencia sexual, sobre todo de aquellos que se revisten de autoridad y ‘formas de control ciudadano’, aquellos que soportan la narrativa revictimizante y criminalizante del trabajo sexual. Hacemos un llamado de atención a la institucionalidad para que exista un reconocimiento de la aplicación del enfoque diferencial de género en los procedimientos, especialmente a la Policía Nacional la cual adquirió compromisos, como lo enuncia la Directiva 003 de 2014".
Por su parte la Policía Nacional salió al paso aclarando que, "se procedió de manera inmediata a verificar los antecedentes registrados en el CAI San Pedro, con ocasión al caso descrito, observando que efectivamente el caso se deriva por la alteración de la seguridad y convivencia ciudadana por parte de personas pertenecientes a la comunidad LGTBIQ+, en los alrededores del parque lineal de San Pedro, pues, según información de los residentes del sector, allí, algunos miembros de la comunidad LGTBIQ+ entre ellos una que se distingue como 'La Peluda', se encontraban realizando exhibiciones sexuales en vía pública, e igualmente, intentando hurtar a los ciudadanos que por esa vía transitaban".
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Y explican, "cuando llegaron los uniformados fueron agredidos con objetos contundentes, tales como piedras y palos por parte de miembros de la comunidad LGTBIQ+; un comportamiento que afecta las relaciones entre las personas y las autoridades, tal como lo establece el artículo 35 de la ley 1801 del 2016".
Finalmente señalaron que los uniformados se defendieron de las acciones del grupo de personas que defendían a la mujer trans, "es prudente recordar, que la policía nacional es garante y respetuosa de todas las personas, sin importar su raza, nacionalidad, sexo u orientación sexual, no obstante, el hecho de pertenecer a la comunidad LGTBIQ+ no es eximente del cumplimiento de lo establecido en nuestra constitución política, artículo 95, numerales 1".
