Bolívar honra la memoria de los héroes caídos: un homenaje eterno a los estudiantes de policía

En el municipio de Mahates, la comunidad se reunió para rendir homenaje a los 22 estudiantes de la Escuela de Cadetes Francisco José de Paula Santander, asesinados hace cinco años en un acto de barbarie que marcó para siempre a la nación.

En el Día Nacional del Estudiante de Policía, consagrado por la Ley 1998, Mahates se convirtió en un espacio de memoria, donde el dolor encontró un eco en la fortaleza y la esperanza. La jornada inició con una eucaristía que trascendió el ámbito religioso, uniendo a oficiales, civiles y familiares en un acto de profundo simbolismo.

Puedes leer: Construirán Central Semafórica Inteligente en Cartagena, la inversión es de $2.700 millones

Durante la ceremonia, el teniente coronel Jhon Edward Correal Cabezas dirigió palabras de aliento a los presentes, especialmente a las familias de los estudiantes caídos. “A las familias de nuestros héroes, les decimos que su sacrificio no fue en vano”, expresó con voz firme, mientras el eco de sus palabras se entrelazaba con las plegarias y el murmullo del viento.

Las ofrendas llevadas al altar —un uniforme, una vela encendida, el pan y el vino— simbolizaron el sacrificio, la esperanza y la trascendencia de aquellos jóvenes que dieron su vida por el ideal de justicia. Las velas, encendidas en su honor, parecían trazar en el aire siluetas de aquellos que marcharon hacia la eternidad.

Puedes leer: Plantarán 300 mil árboles en Cartagena para formar jardines biodiversos

La comunidad bolivarense organizó actividades conmemorativas que llenaron las calles de un espíritu de gratitud y servicio. La bandera ondeaba a media asta, recordando que el luto también puede ser un llamado a la acción.

Al finalizar la jornada, el comandante Correal resumió el sentimiento colectivo: “Cada actuación nuestra es una manera de honrarlos, de decirles que no se han ido. Mientras haya justicia por la cual luchar, ellos estarán en la primera fila.”

En Bolívar, los 22 estudiantes de policía no solo viven en la memoria: su sacrificio impulsa cada acción y su legado resplandece como la luz de una vela que nunca se apaga. Sus nombres, sus ideales y su valentía seguirán inspirando a una nación que no olvida.