3 Sep 2021
08:18 AM
Zara Rutherford llega a Barranquilla en su conquista por darle la vuelta al mundo en solitario
Zara confesó que esta es su primera vez en América y que eligió Barranquilla porque había escuchado hablar de la ciudad.
Hacia las tres de la tarde de este jueves la joven belga británica de 19 años, Zara Rutherford, arribó a la ciudad de Barranquilla procedente los archipiélagos del Océano Atlántico, mientras persigue el sueño de ser la mujer más joven en darle la vuelta al mundo en modo solitario a bordo de un pequeño avión de apenas 325 kilos que ella misma pilotea.
La bienvenida a la capital del Atlántico fue en medio de un aterrizaje entre arcos de agua y calle de honor con colores e insignias del carnaval de la ciudad, arepa de huevo y butifarra, todo para homenajear a esta joven que buscará cruzar 52 países, mientras su mamá cree que está loca y otros la elogian por ser valiente.
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Entre risas dijo que ha encontrado personas que le dicen que es valiente, otros que les da miedo lo que hace y que su mama bromea con que está loca
Zara es una joven de pocas palabras y actitud tímida, que carga una maleta de escasas proporciones sujeta al puesto del copiloto, en donde lleva varios uniformes y apenas lo necesario para darle la vuelta al mundo. Su relación con esta profesión es de cuna, pues su madre y su padre son aviadores.
Dice ella que es muy afortunada porque sus padres son pilotos y desde pequeña ha estado relacionada con la aviación y siempre tuvo este sueño de hacer este viaje, lo que pudo hacer realidad cuando consiguió un patrocinador. No lo podía creer y por lo que está muy agradecida.
Zara confesó que esta es su primera vez en América y que eligió Barranquilla porque había escuchado hablar de la ciudad y quería conocerla; lo que terminó en carcajadas para ella cuando recibió artesanías de torito, las cual las observaba con sorpresa. Esta mañana partirá la joven aviadora hacia panamá, en un viaje que buscará conectar con estados unidos, por la costa del Pacífico hasta Canadá y posteriormente conectar con Rusia, para avanzar hasta retornar a Bélgica.
Su recorrido por esta zona caribeña genera preocupación a su equipo, dado que la temporada de huracanes puede ser un enemigo. Si se tropieza con una tormenta o con fuertes vientos, su ligera aeronave puede perder velocidad, consumir mayor combustible y dejarla sin suministro antes de completar la ruta. Eso sin pensar en que podría el control de la misma. Para eso Sara se prepara todos los días revisando condiciones meteorológicas, para lograr esta hazaña que le daría un puesto en los Guinnes Records.
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