Campesinos ocupan la sede de la Agencia Nacional de Tierras en Sincelejo por desalojo inminente

Desde las primeras horas de la mañana, representantes de 52 familias campesinas del corregimiento Cerrito De La Palma, en el departamento de Sucre, tomaron la sede de la Agencia Nacional de Tierras en Sincelejo. La ocupación, que comenzó a las cinco de la mañana, ha impedido el ingreso de los empleados a la entidad y tiene como objetivo protestar contra un anuncio de desalojo emitido verbalmente por la Sociedad de Activos Especiales (SAE).

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Los manifestantes, quienes habitan la finca La Victoria, ubicada en un territorio indígena, aseguran que llevan más de 30 años cultivando maíz, yuca, ñame, pepino, entre otros alimentos, en esas tierras. Según ellos, el anuncio de desalojo, que alega la adjudicación del terreno a otras familias campesinas, no ha tenido en cuenta el tiempo y el esfuerzo que han dedicado a la tierra, donde han criado a sus hijos y establecido sus vidas.

"Nosotros no queremos más acuerdos ni próximas reuniones. Exigimos la certeza de que podemos quedarnos en la tierra donde hemos echado raíces", afirmó uno de los líderes de la protesta. Los campesinos se mantienen firmes en su posición, rechazando cualquier solución que no garantice su permanencia en el terreno que han cultivado durante tres décadas.

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La situación se torna tensa, ya que los manifestantes aseguran que la decisión de la SAE es injusta y desconoce su derecho histórico sobre las tierras. Además, critican la falta de comunicación formal y consideran que el desalojo es una decisión que pone en riesgo su sustento y el futuro de sus familias.

“No nos sentimos escuchados por la Agencia Nacional de Tierra, nos sentimos vulnerados nosotros exigimos primero que todo respeto, luego de ser escuchado porque nosotros tenemos un predio hace más de 30 años, pero la agencia lo compró hace 1 año y ahorita nos sentimos despojados de él porque ellos dicen que eso ya es privado”. Dijo Sandra Salgado, protestante.

Hasta el momento, las autoridades locales no han emitido una respuesta oficial sobre el conflicto. Mientras tanto, la sede de la Agencia Nacional de Tierras en Sincelejo permanece ocupada.

La comunidad espera que las autoridades tomen en cuenta sus argumentos y les permitan continuar en la finca La Victoria, donde han construido sus vidas y desarrollado su trabajo agrícola, fundamental para la economía local.