¿Brujería? en cementerio encuentran una gallina sin cabeza y un cuervo dentro de una berenjena
En los pueblos del Caribe colombiano se dice que así como existe el bien, existe el mal, y de que de que las hay las hay. Y muchas son las historias que se conocen sobre espantos y hechos paranormales, especialmente en los cementerios, lugares que según dicen, son los apetecidos por quienes trabajan las llamadas ciencias ocultas (brujería)
Enfermedades puestas, amarres amorosos, prosperidad económica, salud, protección, separar familias, son algunas de las situaciones que se escuchan ya sea por envidia, odio, o simplemente querer dañarle la vida a una persona, lo que genera muchos comentarios en los corrillos populares de los pueblos.
Resulta, acontece y pasa que en el cementerio municipal de Magangué (Bolívar) encontraron unas cosas raras que serían como para hacerle un trabajito de brujería a una persona, "al que es lo tienen entre ceja y ceja" dijo un curioso
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Con los pelos de punta están los habitantes de ese municipio porque en el cementerio central apareció una gallina sin cabeza y un cuervo metido en una berenjena, pero eso no es todo, porque hallaron otra cosa de la nadie le quiere meter mano, todos le sacan el cuerpo, y no es para menos.
“Pobrecito a ese que lo tienen bien trabajao. Dios nos proteja y guarde” Es la otra expresión que está en boca de todos en el barrio Simón Bolívar, de esa localidad bolivarense, cuando encontraron algo que los tiene como gallina en casa de zorra.
Miren lo que hallaron en el campo santo: un cuervo muerto dentro de una berenjena cubierto con una tela negra; una gallina sin cabeza, y como ñapa, un paquete del que nadie le quiere meter mano.
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Ante esta clase de situaciones es donde se escuchan dichos de la jerga popular de estos pueblos como: "cada mico sabe en que palo trepa", "ahí es donde la puerca tuerce el rabo", "con la vara que midas serás medido... y el burro salió esmandao", entre muchos otros, que le dan ese toque especial al hecho.
Como quiera que nadie quiso tomar partido del hecho, debieron llamar a la Policía, pero cuando los uniformados llegaron que se percataron de la situación, se quedaron viendo un chispero, arrancando del lugar como alma que lleva el diablo porque dentro de sus competencias no está lidiar con ese tipo de eventos, que son más de la competencia para lideres religiosos como padres, pastores cristianos, o quienes trabajan en la ciencias ocultas a quienes se les dice en el argot popular como "brujos".