Tres niños indocumentados en Santa Marta no tienen acceso a salud ni educación

Una compleja situación viven tres niños en la ciudad de Santa Marta. Los menores no han podido ir al colegio y no tienen afiliación al sistema de salud, porque en la Registraduría Nacional del Estado Civil, no ha sido posible gestionarle sus documentos de identidad; dos de los tres niños hacen parte de una misma familia, mientras que otro de los menores vive en Ciénaga Magdalena.

En total fueron dos las familias que hicieron las denuncias a RCN Mundo sobre dicha situación, el primer caso lo denunció Rosalba Redondo Pereira, abuela materna de dos niños indocumentados, quien comentó que en la Registraduría nacional del Estado Civil del distrito de Santa Marta, les han negado el derecho de identidad a sus nietos, por no presentar el certificado de nacido vivo.

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El caso de estos dos niños inició hace ocho años, cuando Rosalba Redondo, abuela de los menores, atendió el primer parto de su hija en una casa ubicada en Guachaca, zona rural de Santa Marta, en horas de la noche.

“Ese día atendí el parto de mi hija sin ser partera y gracias a Dios todo salió bien, y el segundo parto lo atendí al año siguiente, también me tocó a mí porque otra vez fue en la noche y los carros no querían entrar al barrio donde vivíamos, el segundo parto fue en el barrio Luis R Calvo de Santa Marta, donde muy poco transitan los taxis”, indicó la abuela de los menores.

Añadió que, “los niños se encuentran sin documentos de identidad, sin acceso al sistema de salud y sin poder estudiar en un colegio, esa es la situación de mis dos nietecitos”. 

Los niños indocumentados de la familia Vergara Redondo son los hermanos, María Belén de 8 años y Alexander de 7 años de edad, menores que se están viendo afectados en sus derechos a la salud, la educación y a la identidad.

Ante dicha situación, se pronunció el director del Instituto Colombiano del Bienestar Familiar seccional Magdalena, Mario Ariza Monsalve, quien afirmó que “a los niños es necesario iniciarles un proceso de restablecimiento de derechos a la identidad, a la salud y a la educación a través de un defensor de familia, quien compulsará copias a la Registraduría para que gestionen de manera rápida y oportuna los registros civiles de los niños”, puntualizó Ariza Monsalve.

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El segundo caso se presentó en el municipio de Fundación Magdalena hace tres años cuando nació Santiago, quien tampoco ha podido ser registrado y portar el apellido de su padre que murió meses antes de su nacimiento, la madre del menor, Maryuri Escobar Díaz, nos contó su situación y dijo que, “en la Registraduría me dicen que como el papá está muerto no me lo pueden registrar con los apellidos paternos, y la solución que me brindan es que registre al niño con mis apellidos, pero yo quiero que él lleve el apellido de su papá”.

La mujer añadió que “en la Registraduría me dicen que no pueden porque si es para tramitar el cobro de una pensión o una herencia, no se puede”.

Maryuri Escobar Díaz afirmó que, a pesar de tener el certificado de nacido vivo y pese a que los tíos paternos del menor han ido con ella a registrarlo, en la entidad le dicen que no.

La mamá del menor asegura que necesita registrar a su hijo porque hace poco se intoxicó comiendo una fruta y en el hospital no lo querían atender. “A mi hijo lo atendieron por tratarse de una urgencia vital, pero los medicamentos no los pude reclamar”, sostuvo la mujer.

“Yo me he dirigido a Santa Marta, a Fundación y hasta Aracataca, pero nadie me soluciona nada, al contrario, en el municipio de Aracataca hubo un funcionario de la comisaría de familia que me pidió 3.000.000 millones de pesos para sacarme el registro civil del niño con los apellidos del papá”, indicó.

Por el momento, el director del ICBF, Mario Ariza Monsalve, prometió gestionar de manera interinstitucional el caso de estos tres menores indocumentados, sin escolarización y sin acceso al sistema de salud.