Para 'amarrar' al marido una mujer fingió estar embarazada de 'mellos'

La historia del falso embarazo, que ahora es conocido como “Barriga e’ trapo en el Magdalena”, es protagonizada por la joven Yoleinis Dayana Junco Amaya de 26 años de edad.

La mujer de embarazo gemelar que había sido reportada como desaparecida, no estaba embarazada, era una barriga fingida, según los vecinos, la joven de 26 años no quería que su actual marido terminara su relación sentimental con ella e inventó que estaba embarazada y que además esperaba gemelos. 

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Según el relato de Luis Esneider Junco Amaya, hermano de la mujer, a Alerta Caribe: “Yoleinis había salido de su vivienda el día miércoles sola y con rumbo desconocido, mi hermana tomó un mototaxi y se dirigió hasta la Gran Vía en la Zona Bananera, donde el conductor la dejó y ella nunca le manifestó sentir dolores de parto, el día de ayer jueves 13 de abril, fue hallada desorientada en la playa de Ciénaga”.

Luis Esneider añadió que, “al día siguiente toda la familia la reportamos como desaparecida, estábamos preocupados por ella, porque estaba embarazada, ella iba a tener un par de gemelos”.

El hermano de la mujer, aseguró a RCN Radio que, “en la relación de ella y su marido, había una mujer que la amenazaba, por eso cuando la reportamos como desaparecida, temíamos por su vida”.

Sin embargo, la historia tomó otro rumbo, porque la mujer fue encontrada en el municipio de Ciénaga, con aparente estado de desorientación y con golpes en la barriga, cuando la llevaron hasta el hospital San Cristóbal de Ciénaga, no tenía los bebés en su vientre, pero tampoco tenía cicatriz que indicara que le habían sacado los bebés, al aparecer ella misma se habría propinado los golpes en el vientre. 

En el hospital le practicaron una ecografía donde no se evidenció presencia fetal.

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Uno de los vecinos más cercanos, conversó con Alert Caribe y aseguró que, "ella no estaba embarazada, que se había inventado el embarazo para que su actual marido no la dejara por otra mujer, cuando ella se dio cuenta que no podía ocultar más el supuesto embarazo a su familia y su esposo, montó la escena de los hechos, donde dejó las sillas y el piso de su casa manchado de una tinta roja para simular que era sangre, también dejó mensajes a sus allegados para hacer creer que la habían secuestrado".

La Policía también afirmó que las hijas de la mujer le decían a sus vecinas qué su mamá no estaba embaraza, pues había perdido el bebé meses atrás.

"Al parecer, la mujer estuvo en embarazo pero unos meses atrás y por temor qué su esposo la dejara y se fuera, planeó toda esta cuartada. Los médicos confirmaron que no estaba embarazada y no presentaba lesiones. Estamos frente a una historia como la que ocurrió hace años de la señora que iba a dar a luz y resultó que eran trapos", enfatizó la Policía.