Para la administración, es necesario el acompañamiento del Gobierno Nacional, por lo que se hizo un llamado de urgencia.
El alcalde de Pueblo Viejo, Magdalena, Fabián Obispo, decretó la calamidad pública con el fin de afrontar de manera inmediata los estragos que causa el fenómeno de erosión costera en el corregimiento de Tasajera.
La determinación de la autoridad municipal se conoció en medio del Consejo Municipal de Gestión del Riesgo que se celebró en la población, luego del incremento de la crisis erosiva que afecta a un grupo de familias asentadas a orillas del mar Caribe.
“Ya nos autorizó el mismo Consejo, en sesión que se levantó hace pocas horas, para actuar en las medidas de emergencia y poder llevar a cabo un plan de contingencia, así como poder evacuar a las familias que se encuentran en un alto grado de riesgo”, indicó el mandatario municipal.
Para la administración, es necesario el acompañamiento del Gobierno Nacional, por lo que se hizo un llamado de urgencia.
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“Nos preocupa que si no se logran hacer las obras para la mitigación de esta erosión costera, tendemos como territorio a desaparecer, por eso enviamos el SOS al Gobierno Nacional para que active los mecanismos de respuesta, para la Unidad de Gestión del Riesgo haga una sesión extraordinaria en Pueblo Viejo y se determinen acciones conjuntas para frenar esta situación”, agregó el alcalde Obispo.
De acuerdo a los pobladores en situación de riesgo, la arremetida del mar Caribe es inminente y aunque el oleaje ha golpeado a algunas viviendas, la amenaza de un impacto mayor es cuestión de tiempo.
Según el pescador y líder comunal, Enrique Maldonado, la dramática situación afecta a varias familias que subsisten de la pesca y que de manera angustiosa reclaman atención de las autoridades, para conservar lo poco que tienen.
“Hemos visto con desespero y tristeza que las casas de los pescadores, el mar se las está llevando poco a poco. Es un problema que yo he venido enfrentando desde hace aproximadamente 18 años”, señaló el representante de los pescadores.
Sobre posibles soluciones a la problemática, los pobladores costeros creen que la reubicación y el emplazamiento de barricadas podrían provisionalmente ayudarles a escapar del peligro apremiante.
“Compartiría la posición de reubicar a esas familias que prácticamente ya están en el agua, pero por otra parte, aquí lo que se requiere es una respuesta contundente del Gobierno en la construcción de espolones para la protección de cuatro comunidades que aquí estamos asentadas desde hace muchos años”, agregó Enrique Maldonado.
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Organismos de socorro como Cruz Roja y Defensa Civil llegaron al sitio de emergencia para apoyar a las familias y brindar el acompañamiento a la población.
En el municipio de Ciénaga también se advierte que la crisis erosiva ha llegado a niveles preocupantes, especialmente en los barrios Abajo, Brisas del Mar y Mar del Plata, en donde en algunas casas el mar sigue ganado metros de tierra y las familias esperan la intervención de las autoridades.
El alcalde de la población, Luis Alberto Tette Samper, anunció una intervención de acompañamiento a la población, así como la posible declaratoria de calamidad pública.
