Comerciantes de Santa Marta se encuentran atemorizados por cobro de extorsiones
Algunos comerciantes de Santa Marta han decidido cerrar las puertas de sus establecimientos debido a la inseguridad que sienten por las llamadas extorsivas que realizan sujetos desconocidos, mientras que otros comerciantes han denunciado presencia de sujetos en las puertas de sus casas, que se acercan para cobrar las denominadas ‘vacunas extorsivas’.
El cobro de mensualidades fijas ha generado que algunos comerciantes no denuncien por temor, otros se han visto obligados a cambiar de números telefónicos, mientras que otros cierran sus negocios, y la gran mayoría paga las extorsiones, para que no procedan con ellos ni sus familiares.
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Uno de los afectados, se contactó con RCN Radio Santa Marta, y aseguró que, “la mayoría de los que tenemos negocio ya no podemos mantenernos porque nos toca estar pagando ‘vacunas extorsivas’ a los grupos que se presentan a nuestros negocios, no sabes qué hacer”.
Añadió que, “nadie puede montar ninguna clase de negocio porque en seguida sujetos desconocidos llegan a la casa con la cara tapada, con atuendos como pasamontaña, pañoletas y cascos, e intimidan a uno diciendo que hacen parte de grupos al margen de la ley, afirman que si no damos plata, nos van a matar”. Aseguró uno de los comerciantes.
Ante dicha situación, se pronunció la defensora de derechos humanos Norma Vera Salazar, quien aseguró que, “cuando las extorsiones son a través de llamadas telefónicas, es delincuencia común, y realizan las llamadas directamente desde la cárcel, eso corresponde a delincuencia común”.
“Hay tres tipos de extorsión en Santa Marta, la primera corresponde a grupos u organizaciones armadas como El Clan del Golfo y ‘Los Pachencas’, la segunda modalidad provienen de delincuencia común y la tercera modalidad viene de organizaciones criminales que operan de manera aislada y algunos comandan todo desde las cárceles”. Aseguró Norma Vera Salazar.
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Finalmente la defensora de derechos humanos concluyó, que la ciudadanía tiene más confianza en las redes sociales y en los medios de comunicación, al momento de hacer denuncias de extorsión que en las mismas autoridades, porque no confían en el sistema judicial y policivo.