Debido a la emergencia de inundación, el alcalde decretó la calamidad pública y solicitó ayuda al gobierno nacional y departamental.
Más de cuatrocientas familias se encuentran en riesgo por la creciente del río Magdalena en el municipio de Tenerife; un corregimiento se encuentra totalmente inundado y tres corregimientos más están incomunicados.
La iglesia de San Sebastián, patrimonio cultural nacional, está a escasos cuatro metros de ser arrasada por las corrientes del río Magdalena, que ya arrasó con el árbol de Ceiba más antiguo del municipio, el cual servía como protección de las fuertes corrientes del río más grande de Colombia.
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En diálogo con RCN Mundo, el alcalde de Tenerife, Andrés del Portillo, informó que en estos momentos la red vial del municipio está colapsando y se encuentran incomunicadas las más de cuatrocientas familias de los corregimientos Real del Obispo, Santa Inés, San Antonio y veredas circunvecinas, porque varios tramos de las vías de Tenerife han sido arrasados por el río.
Es de anotar que en estos momentos se encuentran en alto riesgo la vía principal Tenerife – Plato y en zona de peligro está el corregimiento de San Luis.
Ante dicha emergencia, el alcalde Del Portillo declaró calamidad pública tras el desbordamiento del río grande y le solicitó ayuda al gobierno nacional y al gobierno departamental, para poder mitigar el riesgo.
El alcalde dijo que “los niveles del río magdalena en este momento superan la cuota de aumento normal que se tiene para esta época, lo cual es una situación que preocupa, sobretodo nos preocupa mucho el volumen de las aguas porque la corriente es bastante fuerte”.
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Añadió que “el riesgo de inundación es inminente y queremos que el estado sea muy solidario con nosotros, necesitamos apoyo porque en estos municipios ribereños no contamos con la capacidad institucional para responder ante la magnitud de lo que está sucediendo”.
Por su parte el alcalde de El Piñón, Jhair Caballero, se unió al llamado que le hace el mandatario de Tenerife al gobierno departamental y al gobierno nacional para poder mitigar la emergencia en los municipios ribereños como El Piñón, Salamina, El Banco, Plato, Zapayan y Pedraza, que también están sufriendo por el caudal y la creciente del río Magdalena.
