Las autoridades de Santa Marta adelantarán un importante dispositivo para garantizar la seguridad del Parque Nacional Tayrona, durante el periodo de cierre al público del área protegida, que va desde el primero de febrero al 29 de febrero de 2020.
El trabajo articulado contará con la participación de Policía Nacional, Ejército, Armada y la autoridad distrital, con el acompañamiento de Parques Nacionales de Colombia.
El coronel Óscar Solarte, comandante de la Policía Metropolitana de Santa Marta, entregó detalles del procedimiento que realizará la institución, el cual se llevará a cabo en los puntos viales de ingreso al componente ecosistémico.
Según el oficial, “vamos a tener un control en los ejes de acceso con nuestra Policía de Tránsito y Transporte. Al interior del Parque también vamos a tener el control, por parte de nuestros carabineros y por parte de Servicios Especiales, a través de la modalidad del servicio turístico”, indicó.
De acuerdo al teniente Coronel, Javier Cuenca, comandante del Batallón de Alta Montaña del Ejército Nacional, se va a desplegar un trabajo de vigilancia del entorno del parque por aire y tierra.
“Estamos articulando nuestras capacidades, por medio de registros aéreos con nuestros drones y con nuestra aviación militar. Las tropas en tierra vamos a asegurar el parque para que ninguna persona entre. Vamos a estar articulados con nuestra Policía Nacional para que cualquier persona que incumpla las normas, pueda ser judicializada”, afirmó el comandante de la unidad táctica.
La Armada Nacional se suma a la actividad de cierre del Parque Tayrona, con la participación de la Unidad de Guardacostas y la Dirección Marítima.
El capitán de Fragata, Fredman Jiménez, comandante de la Unidad de Guardacostas, entregó aspectos del trabajo que va a desarrollar la estación en las áreas costeras.
“Vamos a tratar de controlar todo lo que corresponde al acceso desde la vía marítima en donde se encuentran establecidas las rutas y en donde vamos a tener el acompañamiento de dos esquemas de seguridad, con unidades de reacción rápida y la cobertura de la torre de control de tráfico marítimo de Santa Marta”, explicó el jefe de la unidad marina.
La prohibición de ingreso al parque mantiene una serie de disposiciones sancionatorias para quien intente ingresar de manera ilegal.
La coronel (r), Sandra Vallejos, secretaria de Seguridad y Convivencia del Distrito compartió aspectos de lo que dicta la normatividad.
“De acuerdo a la Ley 1801 (Código Nacional de Policía), existen algunas conductas que pueden estar tipificadas en ese manual, toda vez que quien no acate las disposiciones de las autoridades político administrativas, se les aplicará la norma. Los únicos que están autorizados en estar en el lugar, son las autoridades ambientales de Parques Nacionales y nuestros pueblos indígenas”, indicó la funcionaria.
Durante el período de suspensión del parque, el cual es concertado con las comunidades indígenas, los mamos de las etnias, como en anteriores ediciones, adelantarán rituales y pagamentos propios de su identidad cosmogónica.
Los funcionarios de las entidades prestadoras de servicios ecoturísticos adelantarán igualmente jornadas de limpieza.
El cierre del área protegida, es el momento propicio para que especies de fauna endémica como el jaguar, el caimán aguja y la variedad de ave conocida como paujil, retornen a zonas a las que normalmente no llegan por encontrarse con presencia de seres humanos.