Los indígenas kamkuamos que permanecen apostados en la alcaldía de Valledupar se declararon en huelga de hambre hasta ser reconocidos como cabildo chiskuinya.
Recordemos que representantes del resguardo chiskuinya quieren renunciar a la administración del actual gobernador, porque aseguran que dentro de la comunidad ocurren irregularidades que van en contra de su cultura y derechos humanos.
Desde que llegaron a pie desde el corregimiento de Río seco, hasta el palacio municipal, los indígenas han guardado total hermetismo con la prensa, afirman que entregan declaraciones solo si son reconocidos como nueva autoridad indígena.
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Tras la vía de hecho que han tomado los indígenas que desean emanciparse del cabildo gobernador de Jaime Arias, el Ministerio del Interior aseguró que los gobiernos indígenas son autónomos en la toma de decisiones.
“No es competencia de las alcaldías municipales otorgar autoridad o dar un reconocimiento, a las administraciones locales solo les compete ser testigo de las gestiones ejecutadas, y al Ministerio del Interior verificar la parcialidad indígena y que sus procesos de elección se den conforme a sus usos y costumbres”, afirma el comunicado que emitió el Mininterior.
Entre tanto, la personaría de Valledupar tiene una comisión delegada para garantizar que no se vulneren los derechos de los manifestantes, que decidieron iniciar la huelga de hambre porque no se les permitió ingresar a la plaza Alfonso López varios utensilios de cocina para acampar de manera indefinida.
En el centro de Valledupar los ciudadanos cuestionan las condiciones de distanciamiento de los protestantes.
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“Se convierte en un problema de salud pública, más en esta pandemia, no tienen siquiera acceso a un baño y agua para asearse, a demás esto rompe totalmente las medidas sanitarias para prevenir el covid 19”, agregó un habitante de Valledupar.
Por ahora la alcaldía de Valledupar entregó bebidas hidratantes a los indígenas y elementos de bioseguridad, mientras hay solución al problema.