Julio Comesaña, dejó de ser el técnico Colón de Santa Fe.
De la boca del entrenador Julio Comesaña ha salido cualquier cantidad de excusas para tratar de paliar las críticas que arrecian en contra
Por ahora, el elenco 'Tiburón' está navegando sin rumbo fijo, sin un juego estable y con carencias en el funcionamiento; y con un panorama incierto de cara al primer partido de Copa Libertadores ante el encopetado Flamengo.
De la boca del entrenador Julio Comesaña ha salido cualquier cantidad de excusas para tratar de paliar las críticas que arrecian en contra del equipo 'Rojiblanco'. "Tenemos jugadores ahora, pero no tenemos equipo. Esto es como cuando revuelven el dominó. Hay que analizar y ver qué cosas tenemos para sostener lo que nos ha dado resultado y ver con lo que se incorpora. Tenemos que elegir rápidamente de acuerdo a las características de los jugadores, una forma de defender y de atacar", expresó Comesaña en su momento para tratar de justificar la llegada de los nueve fichajes que Junior incorporó para este calendario de competencias.
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En medio de los partidos, el entrenador colombo-uruguayo ha variado el grupo de competencia, unas veces forzado por las lesiones y otras por decisiones propias que van encaminadas a buscar los hombres y el equipo ideal, pero la respuesta del colectivo aún no llena las expectativas de los aficionados y de los críticos del fútbol.
“A mí lo que me preocupa y me preocupó siempre es el juego del equipo. Cuando hablamos de que a la gente no le gusta algo o, a veces, no le gusta un cambio, realmente debo decir que yo no hago los cambios para que le guste a la gente, ni trato de poner a jugar el equipo para que le guste a la gente" declaró Comesaña, en tono fuerte, cuando se le preguntó con relación a las modificaciones y la inestabilidad del rendimiento de su escuadra.
La inversión de la dirigencia para contratar jugadores de primer nivel, por ahora, no es bien correspondida por el juego del colectivo; que carece de armonía y luces en la expresión de su fútbol. Ante lo cual, Comesaña debería excusarse menos y plantear soluciones inmediatas y notorias.
Si bien apenas se ha desarrollado un tercio de competencia, y entrando en el análisis del rendimiento de los nuevos fichajes, la nota de calificación no ha sido sobresaliente. Por ejemplo, en el caso del delantero Miguel Ángel Borja, en el cual hay cernida una enorme expectativa, apenas ha marcado dos goles y, por ahora, está en deuda con la prensa y la afición costeña. Está obligado a brindar mucho más.
Danny Rosero fue titular desde el inicio de la competencia, pero después, por lesión, fue relevado. Su lugar fue ocupado por Jefferson Gómez quien, después de un largo periodo, volvió tras su segunda cirugía de rodilla. Igual sucedió con Cristian Higuita, recibió la confianza del orientador, pero dejó el puesto por problemas musculares. Rosero e Higuita, apenas están retomando la forma para volver a la competencia.
El centro campista Larry Vásquez, también fue pieza titular en los primero encuentros, pero no consolidó un accionar para adueñarse del puesto. Volvió frente al Deportes Tolima, pero, infortunadamente, fue expulsado del partido y, por este motivo, no tendrá lugar en la próxima convocatoria de cara al compromiso ante Jaguares, por la séptima jornada de la Liga Dimayor.
Por su parte, el lateral zurdo Jeison Angulo no marcó diferencia cuando le tocó cubrir la franja defensiva; tanto así, que, apenas retornó Gabriel Fuentes, luego de competir con la selección preolímpíca, ocupó esa posición.
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Didier Moreno, quien en las primeras apariciones fue utilizado como centrocampista, sobre la banda derecha, después Comesaña lo situó en el centro, buscando equilibrar el funcionamiento del equipo y sacar mayor provecho posicional de Moreno. Y Allí se le vio mejor.
Sherman Cárdenas, quien se perdió los primeros partido partidos por viajar a Bucaramanga a atender asuntos familiares, apenas ha mostrado destellos de su condición; pero, queda claro, que el santandereano puede entregar una cuota más importante de su fútbol.
El delantero Carmelo Valencia ha dado muestras de su juego inquietante, pero, a pesar de empeño, no ha sido trascendental en su expresión, como ha sucedido con el resto de los nuevos jugadores.
Fabián Viáfara, quien fue uno de los fichajes menos bullicioso de Junior en este calendario 2020, ha tenido un rendimiento parejo, ocupando el sector derecho de la estructura defensiva del conjunto juniorista. Marlon Pîedrahita, quien ya pagó las seis fechas de sanción, tendrá una competencia sana con Viáfara para ocupar esa posición.
