David Ricardo de Ávila Cervantes
David Ricardo De Ávila Cervantes era un joven comerciante y futbolista aficionado.
En un lamentable suceso ocurrido el pasado domingo, David Ricardo De Ávila Cervantes, de 24 años, perdió la vida tras caer desde lo alto de un árbol en una finca del municipio de Turbaco.
El joven, quien era nieto del reconocido excampeón mundial de boxeo Antonio Cervantes, conocido como "Kid Pambelé", falleció el pasado jueves 23 de enero a las 5:00 p.m. en el Hospital Universitario del Caribe (HUC), luego de luchar durante varios días contra las graves lesiones sufridas en el accidente.
Según relató Francisco "Ñato" De Ávila, padre del fallecido, el trágico incidente se produjo mientras David Ricardo disfrutaba de un día en compañía de amigos en una finca de un conocido.
Contó que en medio de la reunión, el joven divisó unas iguanas en la copa de un árbol y decidió subir con la intención de atrapar una de ellas. Sin embargo, al alcanzar una altura considerable, perdió el equilibrio y cayó violentamente al suelo.
Según el relato del padre, el impacto le causó severas fracturas y lesiones en varias partes del cuerpo. Inicialmente, fue trasladado al Hospital Local de Turbaco, pero debido a la gravedad de su estado, fue remitido al HUC en Cartagena, donde finalmente falleció.
David Ricardo De Ávila Cervantes era un joven comerciante y futbolista aficionado. Jugó en el equipo Fortaleza de Turbaco y era conocido por su pasión por el deporte. Además, era padre de un niño de 3 años, quien ahora queda bajo el cuidado de sus familiares.
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‘Kid Pambelé’, afectado por la pérdida, compartió un sentido mensaje en su perfil de Facebook: “hoy, con dolor y desdén, doy el último adiós a uno de mis nietos. David de Avila Cervantes; mi "bebé". Luchaste por mucho tiempo, hijo mío, y diste todo de ti, pero lastimosamente no se pudo aguantar más los duros golpes de la vida. Esta es una batalla difícil de pelear, pero en la que prometemos, como familia, luchar lo más que podamos para afrontar todo juntos.Nos dejas con un vacío inmenso, David. Le pido a Dios que te reciba en sus brazos amorosos y sanadores. ¡Un puño al cielo por ti, mi campeón!.
Su partida deja un profundo dolor en sus seres queridos y en la comunidad de Turbaco, que lamenta la pérdida de un joven lleno de vida y con grandes sueños.
