Estudiantes regresan a las aulas del colegio San Felipe Neri tras su reapertura
Durante nueve años, padres de familia y estudiantes del barrio Olaya Herrera, sector Ricaurte, deambularon a la espera de una solución definitiva para el colegio de su comunidad, el cual había quedado sumido en ruinas. Pero, ese olvido llegó a su fin este martes 16 de julio.
Con una inversión de $23.858 millones, de los cuales la Nación aportó $1.746 millones (el 7,9%), la Institución Educativa San Felipe Neri reabrió sus puertas recibiendo 1.600 estudiantes que pudieron regresar a sus aulas de clases. El resto de la obra se financió con $22.112 millones (el 82,1%), que corresponden a los aportes directos de los cartageneros.
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El nuevo San Felipe Neri alberga 34 aulas (28 nuevas básica y media, y 6 de preescolar), lo que permitirá, por otro lado, atender la educación de primera infancia del tradicional barrio Olaya Herrera y alrededores de la zona suroriental. Además, el plantel cuenta con una biblioteca con áreas de estudio y juegos integrada a la comunidad.
También, la institución dispone de un aula de bilingüismo para iniciar el proceso de plurilingüismo, que está en el Plan de Desarrollo ‘Cartagena, Ciudad de Derechos’, a parte de un salón de tecnología, dotado con 40 nuevos computadores que se convertirá en el primer centro de innovación tecnológica de la zona sur oriental de la ciudad.
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La oferta en mobiliario e infraestructura la complementa un comedor y cocina, como apuesta de la Alcaldía Mayor de Cartagena de migrar la ración industrializada del PAE a comida caliente en sitio; aula polivalente, aula múltiple, zonas administrativas y baterías sanitarias.
Con las modificaciones ordenadas durante este semestre, se agregaron: dos canchas deportivas, adoquín parqueo, topellantas, bicicleteros, zona lúdica de preescolar, cerramiento, demolición y relleno de la zona donde funcionaba el SENA.