El reloj marcaba las 7:40 de la noche del sábado 2 de octubre del año en curso, cuando de la nada aparecieron dos sujetos a bordo de una moto, y a los pocos segundos se escucharon varios disparos que provenían de una mesa de fritos en la carretera principal de Membrillal.
La víctima de los pistoleros fue Darío de Jesús Licona Valencia, de 25 años de edad, quien por lo menos recibió 8 balazos que lo sacaron de este mundo.
Al perecer la actitud de la víctima lo llevaría a la muerte ya que hace poco había salido de la cárcel de Ternera, luego de pagar condena por el delito de homicidio en grado de tentativa, donde un juez de la República halló méritos según las pruebas para proceder a dictar la orden de encerrarlo.
Licona Valencia de acuerdo a las autoridades tenía varias anotaciones judiciales por los delitos de homicidio y hurto, quien se vio involucrado en un hecho violento con un familiar, al parecer en compañía de un primo le propinaron varios balazos a una prima por unas cervezas que la mujer no les quiso vender, ese caso ocurrió el 29 de mayo del año 2017, justo en el mismo sector donde fue asesinado.
La mesa de fritos donde fue impactado Darío de Jesús es de la esposa de un primo, quien resultó herida y debió ser llevada al Hospital Universitario del Caribe donde permanece en la UCI, pero recuperándose.
Entre tanto a la víctima la llevaron hasta el CAP de Arroz Barato en estado agonizante, pero al ingresar ya no tenía signos vitales, informó el personal médico en turno. Se espera que los investigadores de Policía Judicial puedan identificar a los responsables de esta muerte, ya que en el sector al parecer hay varias cámaras de seguridad, lo cual podría ayudar.