Procuraduría denuncia afectaciones ambientales al proyecto Ciudad Mallorquín
La Procuraduría General de la Nación detectó posibles afectaciones ambientales al proyecto urbano Ciudad Mallorquín en zona Ramsar que corresponde a la ciénaga de Mallorquín, localizado entre Barranquilla y el municipio de Puerto Colombia, al hacer la visita técnica.
Así mismo, el Ministerio Público registró disposición inadecuada de material de construcción en las zonas aledañas, donde esta acción posiblemente fue precedida de una tala de la vegetación existente.
Ante estos problemas, el ente de control instauró una acción popular contra varias entidades públicas y privadas, con el fin de proteger los derechos colectivos.
Le puede interesar: [En Video] Asalto a concejal terminó en balacera en Soledad, Atlántico
La demanda involucra al Ministerio de Ambiente, el Ministerio de Vivienda, a la CRA, al departamento de Atlántico, los municipios de Puerto Colombia y Barranquilla, el área metropolitana de Barranquilla y la empresa Triple A S.A. ESP.
Entre las principales pretensiones de la acción están la reforma del Plan de Saneamiento y Manejo de Vertimientos (PSMV) para Puerto Colombia, la creación de un Plan Metropolitano de Ordenamiento Territorial, y la financiación de obras para el tratamiento de aguas residuales y el saneamiento de la región, con el objetivo de proteger los recursos naturales y evitar el desarrollo urbano desordenado en áreas ecológicamente sensibles como la Ciénaga de Mallorquín.
El proyecto ha generado polémica por el impacto ambiental que generaría. A la controversia se unió la Asamblea del Atlántico, la cual, expresó su preocupación por los efectos para la movilidad y la cobertura de servicios públicos.
Desde la corporación hicieron un llamado a las autoridades en torno de una mejor planeación de Barranquilla y el departamento, tras la mala experiencia de algunos proyectos urbanísticos.
Le puede interesar: Prográmese: Así trabajarán en Barranquilla algunos bancos durante Navidad y fin de año
La iniciativa se construye en el área de amortiguación de la ciénaga de Mallorquín, y contempla 18.000 nuevas unidades residenciales, lo que para Ashton es un ‘campanazo de alerta’.